lunes, 12 de mayo de 2008

Valle de Bravo, para presumir

Tengo por costumbre ir al centro, al pueblo, caminar por las calles, segura de que ahí conoceré la identidad cultural del cualquier lugar que visite. El caso de Valle de Bravo no fue la excepción, por el contrario me confirmó que en ello me llevo una ganancia.
Me emocioné mucho y me gusto más lo que encontré más allá de su corredor turístico.



Valle de Bravo es más que una hermosa laguna a donde se van los de la high a esquiar. O el destino de un resto de chavitos que van a ponerse bien brutos para luego decir que se pasaron el fin de semana "pedísimos en Valle".


La parte conocida de Valle tiene que ver con su laguna, que sí está bien chula, las casas enormes de políticos, artistas y empresarios (que se mandan a hacer sus iglesias exclusivas), sus paisajes boscosos y la práctica de deportes de elite como el golf, el esquí, equitación o el vuelo en planeadores. Abundan los anuncios de la venta de casas en dólares y las ofertas para cirugías estéticas.

Pero... Valle de Bravo tiene otra cara, otra cultura y otra identidad, totalmente opuesta. Y pues sí, aunque suene a cliché, creo que lo mejor es su gente, que son además de amables, sobrevivientes y preservadores de la cultura purépecha.

"Ahora me pagas"

En el pueblo, el pueblo de reúne en su kiosko. Las mujeres no se dejan "retratar" y cuando las "retratas" te cobran.




El otro Valle de Bravo es un pueblo de casas blancas, tejas rojas, balcones, calles empedradas y ¡¡tráfico!!!



Donde la gente, los pobladores aún caminan y adornan sus calles.




Pos supuesto, como iba a faltar. En el centro, su enorme catedral, con altísimas puertas y gigantescas columnas, pero sin ángulo para las fotos. De hecho la fachada y la entrada da hacia una calle pequeña y no al centro de la plaza.




La gente se reúne en el kiosko. Entre otras cosas a escuchar a la banda del pueblo.


Ahí las mujeres venden sus tejidos en cuadrillé. A 20 y hasta en 15 pesos.



Hace mucho no me emocionaba ver adornitos en la calle, pero en esta calle, con este cielo y con el aire que corría, lucían hermosos.


Igual, andaba de simple o inspirada, pero este cielo, en el centro del pueblo, me encantó. El clima en Valle es bueno, aunque tiende al frío.


La venta de artesanías y sombreros es muy común en el pueblo. Sobre todo entre la gente mayor.


Ventana en Valle de Bravo. Ja.